La calle Alfonso: emblema de Zaragoza

Descubre esta calle tan bonita

La calle y sus establecimientos

En la calle Alfonso encontramos pastelerías como Tolosana (nº 6) y Manolo Hornes (nº 43), Zanellato (nº 21) y heladería A Tu Rollo (Prudencio 34, al lado) como diversa, atractiva o actual Espacio requerido a Calle Alfonso), Ribs Restaurant (No. 13), Tiger (No. 17), Ale-Hop (No. 24) y Miniso (No. 29) tiendas de regalos, tiendas de accesorios varios para teléfonos, boutique de pastelería argentina (No. 2 ), una gran confitería (esquina de la calle Alfonso I y El Coso), y un centro de negocios, además de edificios para alquiler de departamentos.

La calle muy animada en el centro histórico de la ciudad de Zaragoza, con tiendas donde comprar souvenirs de Zaragoza y variedad de tiendas, bares y pastelerías. Es perpendicular a la Plaza del Pilar. Es divertido pasear por las calles paralelas de Jaime I.

La construcción de la calle Alfonso

En la Zaragoza del siglo XIX, una serie de proyectos urbanísticos transformarán la ciudad, coincidiendo con el ascenso de la alta burguesía. En 1855, el arquitecto Miguel Jeliner acometió el primer proyecto parcial de enderezamiento de la zona de la calle del Trenque. Querían crear una calle que uniera la calle Coso con la plaza del Pilar. En 1860 se encargó el proyecto a José de Yarza, arquitecto municipal de Zaragoza, y se aprobó un año después. Pero la construcción no comenzó hasta 1865, siendo alcalde don Antonio Garro, a cargo de los arquitectos José de Yarzaminana y Mariano López.

Es un proyecto de intervención activa dentro de la ciudad, como han emprendido otras ciudades europeas en estas décadas. El proyecto está a cargo del arquitecto José de Yarza Miñana, con Antonio de Candalija a cargo de la alcaldía. Pronto, la calle Alfonso I se convirtió en la zona elegida por las familias nobles de Zaragoza para construir sus mansiones.

La calle Alfonso es una vía popular en la ciudad de Zaragoza

Dando un giro de 180º y volviendo a los clásicos, hay que destacar las churrerías callejeras que reinan en las calles de Zaragoza, con más presencia en la actualidad. El famoso es el que se encuentra en la calle del Coso junto a la Audiencia Provincial. El reconocible olor a churros también nos llevó al Parque Macanaz, junto al Puente de Santiago, donde se descubrió otra "churropista". En Arrabal es popular La Bola de Plata, otra referencia a las churrerías callejeras.